Sal de la vida de pecado. Haz las renuncias necesarias.
No vivir en pecado: Renunciar a todo lo que ocupa el lugar del Padre en nuestros corazones.
Gracias Padre por la oportunidad de venir a Tus Pies. Gracias por Tus Misericordias renovadas. Gracias por Tu Amor y por Tu Paciencia. O Señor, perdóname por toda ofensa a Tu corazón en palabras, en pensamientos, en acciones, en sentimientos, en disposiciones, en motivaciones, en actitudes, en omisiones. Lávame con la Sangre de Cristo Jesús y renuévame Te suplico en el nombre de Cristo Jesús. Renueva el Gozo de Tu Salvación en mí Te suplico. Ven a mi encuentro y concédeme de encontrarme conTigo en el nombre de Cristo Jesús. Ilumina mis ojos sobre las maravillas de Tu Palabra y transcribe Tu Verdad en mi corazón. Escudríñame y concédeme de ser más como Tu. Obra en mi mente, obra en mi corazón Te suplico en el nombre de Cristo Jesús. Derrama Tu Poderosa Gracia y Favor sobre nosotros y los nuestros en el nombre de Cristo Jesús.
Juan 9:16
¿Cómo puede un hombre pecador hacer estas señales? Y había disensión entre ellos.
Vivir en el pecado ciertamente no agrada a Dios y además nos aparta de Su servicio. La práctica del pecado en nuestras vidas después de haber aceptado a Cristo Jesús y experimentar Su Poder Salvador y Liberador viene por ataduras a las cuales no he renunciado. ¿Qué es renunciar? Renunciar es el hecho de perder derecho voluntariamente sobre algo o alguien. Es entregar, someter a otra voluntad que no sea la nuestra. Es no esperar ni tampoco formar intereses, expectativas. Vamos a aplicar esta palabra a las relaciones humanas. Renunciar a una relación no es desarrollar sentimientos negativos hacia esta persona, sino entregar nuestros propios corazones a Dios para que Dios mismo llene este espacio que anhelamos y por lo cual idolatramos esas personas. El Llamado a Renunciar es un llamado a enfocarse. Enfocarse, enchufar nuestros corazones a la fuente que satisface verdaderamente.
Te quiero preguntar, ¿habrá alguna persona en tu vida por la cual estás desarrollando sentimientos que te puedan ahogar? El Señor te dice, enfócate a vivir una vida cristiana de amor y comunión con Él sin estorbos.
O Señor, muchísimas gracias por Tu Palabra. Señor, concédeme a entender que Renunciar es Amarte. Señor, concédeme a entender que Renunciar es dejarme Amar más por ti. Señor, escudriña mi corazón y concédeme de tenerTe a ti como mi Fuente Inagotable de Amor y Vida. Gracias por haberme hablado y sanado en el día de hoy.